Autobiografía

Autobiografía

Irene 

(199*.........)

     Nací en la cuidad de Toluca el 20 de Febrero, mis padres son Rebeca, ella se dedica al hogar, mi papá se llama Herminio; él se dedica al comercio, empecé a caminar al cumplir un año  tres meses, al cumplir cinco años entré al jardín de niños y conocí a mis amigos, mi maestra se llamaba Rocío, aprendí a pintar, iluminar y pegar pero sobre todo a respetar a mis compañeros y a todas las personas.

Posteriormente pasaron los años e ingresé a la primaria,  conocí a nuevos compañeros y a unos que ya conocía desde el kinder, la maestra que se llama Belén me enseñó a leer y a escribir muy bien, también me enseñó a resolver sumas  y restas, a veces me llamaba la atención porque me portaba mal, y lo que me gustaba de mi maestra de primer grado es que se portaba muy bien conmigo y con todos mis compañeros.

     Pasé a segundo grado,  me cambiaron de escuela y entré a la escuela primaria Rafael Favila, no conocía a nadie pero con el tiempo conseguí nuevos amigos y mi maestra se llama Patricia, con ella aprendí las tablas de multipicar y se portaba bien con todos mis compañeros, aprendí mucho con la maestra y mi promedio al final de ciclo fue de 8.4.

     Pasé a tercer grado, al inicio del año hice un examen  y tenía miedo de que me cambiaran de salón, pero  no me cambiaron y solo fue  algunos de mis compañeros  y me quedé con la maestra Luchita, pasaron los meses y me porté mal, la maestra se molestó y me jaló las orejas, pero me enseñó a dividir, pasaron los exámenes  y al final del año pasé con 8.4 de calificación y pasé a cuarto grado.

    En cuarto grado mi  maestra fue María de los Angeles, nos enseñó a dividir, me portaba bien con ella y casi no me llamaba la atención pero a veces sí  me portaba un poco mal, lo que me gustó de ella es que casi no me regañaba, después de hacer exámenes terminó el ciclo escolar y pasé a quinto grado.

    En quinto grado aprendí a dividir con cifras más grandes, gracias a la maestra Lulú, también nos enseñó a multiplicar, al inicio del año empezamos a ensayar para desfilar y ella ponía mucha atención para que no platicáramos e hiciéramos correctamente los ejercicios.

     También no nos dejaba salir al receso si no terminábamos los ejercicios que  dejaba en clase, y a los que no traían uniforme de gala  los dejaban sin Educación Física, pero la maestra sí se portaba bien con nosotros y  su forma de ser me gustaba, finalmente pasaron los meses  y terminé el ciclo escolar con un promedio de 8.1.

    Posteriormente pasé a sexto gardo de primaria con la maestra que Patricia y nos enseñó a dividir correctamente con cifras más grandes, me gusta su forma de ser y de hablar, por ahora sigo en sexto grado de primaria, espero terminar y seguir estudiando.